jueves, 29 de octubre de 2009
¿TE HE ASUSTADO?
Esta historia comienza en el gran castillo del Conde Drácula, allí como ya os habréis supuesto vivía el mismísimo Conde Drácula. El castillo estaba situado en lo alto de una colina.
Por si todavía alguien no lo sabe, este singular vampiro tenía una mujer y una hija; estas dos, eran igual de aterradoras que él pues, ellas eran dos repugnantes momias, pero no os equivoquéis al pensar que toda la familia Drácula era igual de aterradora pues, el Conde Drácula también tenía un hijo; éste no era nada parecido a su familia, él era un pequeño vampiro que nunca había asustado a nadie, al contrario había muchos que se burlaban de él, su madre y su padre estaban muy disgustados con él, al contrario que con su hermana pues ella había conseguido asustar a un montón de personas.
Un buen día, el pequeño vampiro de nombre: Raúl Drácula, estaba sentado en un banco, cuando su madre se le acercó y le dijo a Raúl que debía ir al mundo de los humanos para intentar asustar a alguien. A Raúl no le pareció bien esa idea, al contrario le horrorizó, pero desgraciadamente no había otra solución. Al día siguiente el pequeño Raúl Drácula partía al mundo de los humanos.
Fue un viaje muy largo y cansado, para que os hagáis una idea duró aproximadamente 6 horas en el “avión muerto”. Después del largo y cansado viaje, Raúl aterrizó por fin en el mundo humano, al llegar allí Raúl se sintió desorientado pues con un sol brillante alumbrando todo desde ahí arriba, tantos árboles, tantas plantas…Raúl decidió esperar a la noche para asustar a su primera víctima, hasta entonces se escondería en un oscuro rincón porque a parte de los ajos y las cruces los vampiros en general odian la luz del sol.
Por fin se hizo de noche y Raúl ya podía entrar en acción; decidió asustar primero a una presa fácil: un abuelita regordita que pasaba por allí, Raúl contó hasta tres escondido detrás de una esquina, una… dos… y… ¡Tres!. Saltó ante su presa pero en vez de escuchar un grito de terror como el esperaba, escuchó un fuerte golpe en su mejilla pues, la abuela regordeta le había dado con su bolso.
- ¿Cómo es que no he asustado a esa abuela?- Pensó dolorido Raúl.
Pero Raúl no se dio tan pronto por vencido, lo intentó otra vez, pero resultó penoso, lo intentó unas cuarenta veces más pero con resultados similares o, incluso peores. Raúl no podía más ya era casi de día y no había conseguido levantar un pequeño gesto de admiración, ya rendido se echó a llorar. En ese justo instante pasaba por allí un niño llamado Jaime, este niño al ver llorar al pequeño vampiro le entró tanta pena que se puso a su lado y le dijo:
- ¿Por qué lloras?-
-¡Aaahhhg!... ¿Te he asustado ahora?- preguntaba Raúl.
- No, para nada- respondía Jaime.
-¡Rrraaaaag!... ¿y ahora?- insistía Raúl.
-Sigues sin asustarme-respondía otra vez Jaime.
Jaime y Raúl esperaban impacientes el gran día. Al final, después de mucho esperar Halloween llegó .Pero allí Halloween no se celebraba igual, la gente no se disfrazaba solo pedían caramelos en las casas.
El plan que habían hecho ellos resultó ser todo un éxito: primero Raúl se escondía mientras Jaime agrupaba a un grupo de personas y las dirigía al lugar donde Raúl estaba escondido.
Raúl les asustaría, era un plan genial.
-Raúl, hijo mío estoy orgulloso de ti ya puedes volver con nosotros-
En casa de Raúl todo eran felicitaciones y halagos y, éste estaba muy contento de por fin haber conseguido asustar a alguien.
Y en el mundo de los humanos en forma de recuerdo a Raúl Drácula, en Halloween todos se visten de monstruos para así todos los años recordar al pequeño vampirito que una vez estuvo allí.
FIN
Todo Halloween
miércoles, 28 de octubre de 2009
HALLOWEEN
Allí había un colegio llamado Pinar Hondo. En el estudiaban desde primero hasta sexto.
Después del susto todos se pusieron en marcha y se fueron a la primera casa. Decidieron que como eran muchos se separarían en dos grupos.
Ángeles, Miriam, Lorena, J. Luis, Jaime... Se fueron a casa de la familia más misteriosa. Los demás se fueron a la casa de la familia nueva del pueblo.
En la casa misteriosa daban muchos caramelos. Cuando llegaron les dieron muchos caramelos pero no todo fue tan bien, a la salida les esperaban el resto de la familia para atraparlos y volver a llevarlos a la casa.
Los demás ajenos a lo sucedido, ya habían recogido muchos caramelos y les esperaban en el lugar acordado para estar a las once. Esperaron hasta las doce pero ya los padres les llamaron y se tuvieron que ir.
Desde aquel día no se supo más de esos niños y nadie volvió a ir a la casa misteriosa que desapareció con extraños gritos de niños pidiendo socorro.
Y aquí acaba la historia de Halloween más terrorífica.
LA CASA ENCANTADA
- La, la, la -cantaba Rosita.
Rosita dejó de chillar y se desmalló. Cuando despertó estaba encerrada en el sótano de la caso o eso creía ella.
-¡Oh no! Me han secuestrado. ¡Oh! Un segundo. Parece que alguien murmura algo. Miró alrededor de ella y vió a un anciano:
- Hola, ¿como te llamas? -le preguntó.
Soy Hugo y llevo más de 20 años encerrado aquí, ¿y tu, cuando has llegado hasta este horrible lugar? -preguntó el anciano.
-Estaba jugando a la pelota y un hombre de una túnica negra me secuestró.
Hugo y Rosita se hicieron amigos y se ayudaron mutuamente.
Cinco días mas tarde Rosita se puso a pensar cómo podían escapar de allí.
-¡Ya sé! -dijo Rosita. He pensado en un plan perfecto para salir de este horrible y asqueroso lugar.
-Ven, te lo explicaré -dijo Rosita.
El plan era: Con los cubiertos que depositen por la rendija, iremos rascando poco a poco la tierra para salir. Con las sábanas que tenemos cubriremos el agujero para cuando llegue el cocinero u otro hombre.
Al fin y al cabo terminaremos por escapar.
-Espero que este plan salga bien -dijo Hugo.
Poco a poco los dos amigos fueron escarvando en la tierra.
Se escucharon unos pasos y rápidamente taparon el agujero.
-Uf, que susto -dijo Rosita
Todos los días hicieron lo mismo, cavar, cavar y cavar. Al cabo de un tiempo el agujero se fue haciendo menos pesado.
- ¡Mira Hugo! -dijo Rosita.
-¿Que pasa? -respondió.
- ¡Se ve la luz!
Hugo y Rosita habían acabado de cavar y se pusieron muy felices.
Al final los dos amigos se fueron a vivir juntos y nunca más volvieron a pasar por la casa maldita.
¿QUERÉIS SABER POR QUÉ CAPTURARON A HUGO? ¿O A ROSITA? ¿O QUIZÁS PARA QUÉ LOS QUERÍAN?
PUES OS QUEDARÉIS CON LA INTRIGA PORQUE OS LO CONTAREMOS EN LA PRÓXIMA ENTRADA.
Nuestro club natación de El Puerto
LA MEDALLA
martes, 27 de octubre de 2009
Nubes...
lunes, 26 de octubre de 2009
domingo, 25 de octubre de 2009
jueves, 22 de octubre de 2009
El mar
Grande y azul,
bonito y bravo
vestido de tul
y yo lo amo.
Es la gran cuna
de muchas especies
sin incluir la mula
incluyendo los peces.
Y cuando la luna
rodeada de estrellas
lo mima y lo acuna
como una doncella.
Hay que adivinar
y también acertar
para mirar
el bonito mar.
Grande y azul
bonito y bravo
vestido de tul
y yo lo amo.
sábado, 17 de octubre de 2009
El lápiz juguetón
lunes, 12 de octubre de 2009
¿Te gustaría imprimir y dibujar mariposas?
Y otra poesía más
La mariposa es hermosa,
hermosay de color rosa.
Recorre el campo verde
con sus lunares verdes.
La mariposa es hermosa,
hermosa y de color rosa.
Va de flor en flor
y de color en color.
La mariposa es hermosa,
hermosa y de color rosa.
jueves, 8 de octubre de 2009
Y la serie televisiva que más está pegando en este momento es......
APRENDE EL BAILE DE LAS DIVINAS
miércoles, 7 de octubre de 2009
Los efectos emocionales de la violencia en televisión en los niños....
Cuanto más violencia en la televisión, menos sensibilidad de los niños. Aparte de eso la observación de escenas de dolor, horror y sufrimiento resulta en sentimientos que son descargados en forma continua durante o después de la observación de programas de contenido violento. De contenidos violentos se pueden llamar a las escenas que impliquen la destrucción, lesiones o daño (físico y/o psicológico) a personas, animales o cosas. La acción de los actores, los movimientos de la cámara, el ritmo del montaje y el desarrollo de la escena de violencia constituyen una desproporcionada fuerza de impacto en la televisión, hasta el punto de que, en mayor o menor grado, se pueda tomar por real lo ficticio. Pero, quitando la violencia, los niños también pueden aprender algo positivo de la televisión. Algunos valores sociales como la cooperación, la amabilidad con los demás y también algunos aspectos relacionados con su escolaridad. Todo dependerá de la orientación y control que tengan de sus padres.